Windows 98 y ME no ofrecen un sistema para proteger los archivos privados de cada usuario, una deficiencia grande especialmente cuando varias personas comparten un mismo PC.
En Windows XP, en cambio, es posible crear cuentas separadas para cada una de las personas que utiliza un PC. De esa forma, cada usuario tiene un escritorio personalizado, una lista de sitios favoritos propia y programas diferentes en el menú Inicio; además, se pueden mantener aislados los archivos personales.
Windows XP crea un juego independiente de carpetas para almacenar los archivos y las configuraciones de cada usuario (Mis documentos, Favoritos, Menú Inicio, etc.). Y siempre que se inicia el programa se ve una pantalla de bienvenida en la que cada persona escoge su cuenta (uno puede colocar una foto o una imagen que lo represente).
